Ir al contenido principal

Los riesgos mentales de presidir Estados Unidos


Los riesgos mentales de presidir Estados Unidos

Publicado: 1 may 2019 12:41 GMT
A lo largo de la historia varios presidentes estadounidenses sufrieron trastornos psíquicos durante sus mandatos.
Los riesgos mentales de presidir Estados Unidos
Joshua Roberts / Reuters
Desde que el 45.º y actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomara posesión de su cargo en enero de 2017, la noción de 'locura en el ámbito de la política' se ha puesto muy de moda. Casi todos los principales noticieros del país norteamericano discuten abiertamente acerca de si la salud mental del presiden lo capacita para ejercer la presidencia, según lo establece la vigesimoquinta enmienda a la Constitución de EE.UU.
"¿Qué diríamos si un líder de Alemania, China o Brasil hubiera publicado unos tuits como los de Trump? ¿Cómo los cubriríamos? Diríamos: 'Esta persona no está sana', y nos preguntaríamos si es apta para ocupar su cargo", comenta Brian Stelter, presentador y corresponsal de CNN.
"Para los republicanos que se han inclinado a aceptar la reelección de Trump en 2020: lea sus tuits [...], piense seriamente sobre su estado mental y psicológico y luego dígame que le parece bien que sea el presidente de Estados Unidos otros cuatro años adicionales", tuiteó, por su parte, el fundador de la revista política estadounidense The Weekly Standard, Bill Kristol.
Las especulaciones sobre la flexibilidad cognitiva de Trump se han multiplicado en EE.UU. El número de publicaciones dedicadas a este tema habla por sí solo. 'El peligroso caso de Donald Trump: 27 psiquiatras y expertos en salud mental evalúan a un presidente', de la doctora Bandy X. Lee, psiquiatra forense de la Escuela de Medicina de Yale (Connecticut, EE.UU.) es uno de los libros más exitosos sobre este tema. Según advierte la autora, el mandatario tiene "severos impedimentos emocionales" que plantean "una grave amenaza para la seguridad nacional".
Aunque Donald Trump es el único presidente estadounidense cuyas competencias mentales y aptitud para el cargo han sido objeto de una de discusión pública tan activa, ciertos datos históricos evidencian que sus predecesores también padecieron una amplia gama de trastornos psíquicos, desde fobias y alcoholismo hasta psicopatía

Depresión y trastorno bipolar

Según reflejan los datos del estudio 'Enfermedades mentales de los presidentes de EE.UU. (1776–1974)' del profesor de psiquiatría de la Universidad de Duke de Carolina del Norte, Jonathan Davidson, 18 de los presidentes que estaban en cargo durante ese periodo (el 49 %) sufrían de alguna anomalía. Curiosamente, un 27 % de ellos enfermaron mientras estaban en el poder.
El diagnóstico más común entre los mandatarios examinados es el de 'trastorno depresivo mayor', atribuido a 9 de ellos, incluidos a Abraham Lincoln (1861–1865), Woodrow Wilson (1913–1921) y Dwight Eisenhower (1953–1961). No obstante, en varios casos las enfermedades ponen en duda la aptitud de esos presidentes para liderar un país.
Así, los individuos que padecen trastorno bipolar, también conocido como psicosis maníaco-depresiva, atraviesan los así llamados 'episodios' o 'fases' de estado de ánimo maníaco o depresivo, que se alternan periódicamente, independientemente de las circunstancias externas. Theodore Roosevelt y Lyndon Johnson sufría un trastorno bipolar de etapa I, mientras que John Adams, de etapa II.
_Abraham Lincoln, president of the United States of America. Date1865 / Las bibliotecas generales, la Universidad de Texas en Austin / D. Van Nostrand / Dominio público

Los 'psicópatas' más prominentes

Otro estudio titulado 'Dominio audaz y la presidencia de Estados Unidos', encabezado por un grupo de especialistas de la Universidad Emory en Georgia (Atlanta), analiza a todos los mandatarios americanos, menos Barack Obama y Donald Trump, para evaluar "las implicaciones de los rasgos de una personalidad psicopática de cara a un liderazgo político exitoso y no exitoso". 
Curiosamente, entre los presidentes considerados como los más 'inadecuados' figura Andrew Jackson, que a menudo comparan con Donald Trump. Tanto es así, que algunos califican al actual inquilino de la Casa Blanca como "la encarnación moderna del 17.° presidente (1865-1849) que, por cierto, también fue uno de los jamás sometidos a 'impeachment'. El entonces líder norteamericano se libró de la destitución por un solo voto en el Senado.
En el libro 'La arrogancia del poder: el mundo secreto de Richard Nixon', de Anthony Summers y Robbyn Swan, se afirma que Richard Nixon era un neurótico con problemas de alcoholismo y adicción a medicamentos antidepresivos y de insomnio. Asimismo, Lyndon Johnson era famoso por su egocentrismo y hábito de humillar en público a sus subalternos, incluso a su esposa (hasta el punto de coquetear con otras mujeres de modo que ella lo viera), y Bill Clinton contaba con comportamiento sexual compulsivo y provocó varios escándalos de abuso sexual.
Richard Nixon, el trigésimo séptimo presidente de Estados Unidos. / Gobierno federal de los Estados Unidos / Dominio público

El último y el más popular

Como es sabido, a Donald Trump le gusta expresar sus emociones y pensamientos en declaraciones públicas ante la prensa, no obstante, aún más frecuentemente recurre a las redes sociales, y en particular, a Twitter.
Los tuits del líder norteamericano —que a veces pueden ser ambiguos e incluso excesivamente atrevidos— muchas veces acapararon los titulares de las noticias, por lo que la pregunta de si merece Trump sumarse las filas de los inquilinos de la Casa Blanca 'enfermos' resulta lógica. Los puntos de vista de los especialistas difieren. Si bien el profesor Davidson estima que el narcisismo de Trump no está vinculado con problemas mentales, existen opiniones de que eso podría ser un síntoma de trastorno obsesivo compulsivo.
Nassir Ghaemi, profesor de psiquiatría en la Escuela de Medicina de la Universidad Tufts (Massachusetts) y autor de un libro en el que estudia los vínculos entre el liderazgo y enfermedades psíquicas sobre los ejemplos de Napoleón, Lincoln, Churchill y Hitler, entre otros, describe a Trump como un individuo con falta de sueño y concentración, pero a la vez muy impulsivo (incluido sexualmente) y energético, que son "síntomas obsesivos clásicos". Pero si no se considera apropiado, entonces, ¿quién establece la norma?

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Las poderosas imágenes de la sangrienta guerra civil que terminó hace 25 años en El Salvador

  Las poderosas imágenes de la sangrienta guerra civil que terminó hace 25 años en El Salvador Fotos: Giuseppe Dezza Textos: BBC Mundo 16 enero 2017 FUENTE DE LA IMAGEN, GIUSEPPE DEZZA Pie de foto, El Salvador pasó en guerra toda la década de 1980. Pero el 16 de enero de 1992 se firmó la paz. Nunca fue oficialmente declarada, pero la guerra civil de El Salvador se prolongó durante más de una década. El conflicto empezó el 10 de enero de 1981, cuando el recién formado  Frente Farabundo Martí para  la  Liberación Nacional (FMLN)  anunció el inicio de su "ofensiva general". Y se prolongó oficialmente hasta el 16 de enero de 1992, cuando se firmaron los llamados  "Acuerdos de Chapultepec" , en la Ciudad de México. BBC Mundo te invita a recordar la firma de esos históricos acuerdos, y los eventos que le precedieron, con esta galería del  fotógrafo italiano Giuseppe Dezza. FUENTE DE LA IMAGEN, GIUSEPPE DEZZA Pie de foto, El conflicto dejó más de 75.000 muertos y desaparec

Vivo orgullosa y agradecida de haberme formado como médico en Cuba

  Respuesta de una médico peruana ante ataque contra Cuba Vivo orgullosa y agradecida de haberme formado como médico en Cuba Por  Edali Ortega Miranda  |  07/05/2021  |  América Latina y Caribe Fuentes:  Diario UNO La autora de este artículo expone su posición ante un panel con insultos a Cuba (Av. República de Panamá-Perú) que forma parte de la campaña de paneles publicitarios contra el comunismo que supuestamente amenaza al Perú mediante el candidato Pedro Castillo. *** No voy a detenerme en la compleja situación de un país (Cuba) que amo profundamente, pues tiene muchas, muchísimas aristas y cada una de ellas merece ser evaluada y escuchada, pero sobre todo juzgada y manejada por su gente, no por personas de otras regiones que no tienen la menor noción de lo que es Cuba y sobre todo de lo que son los cubanos. Sí voy a referirme a lo que nos toca a nosotros, a Perú, un país en franca crisis moral, política, social, económica y ni qué decir sanitaria, con un reporte oficial al día de

Chile: buscando el orden de la casa antes que llegue Trump

Chile: buscando el orden de la casa antes que llegue Trump Luciana Ghiotto Facebook Opinión 22/10/2019 Foto: Telesur - A + A Los acontecimientos de Chile de estos últimos tres días han generado sorpresa, tanto en el país como en la región. La protesta de carácter nacional no tiene dirigencias evidentes, ni delegados o voceros. Una protesta que no puede ser controlada es, desde la óptica del gobierno, más peligrosa que una huelga general o una movilización llamada por organizaciones sociales previamente reconocidas. Aquí no hay cabezas, sino puro hartazgo. La respuesta del gobierno fue volver a la imagen del 11 de septiembre de 1973, como si nunca nos hubiésemos despertado de ese día: con el toque de queda y el despliegue de los militares en las calles se avivaron los peores recuerdos de todo el Cono Sur. En las últimas 48 horas las fuerzas armadas actuaron en algunas ciudades con una notoria violencia,