Presiones de EU a México
Opinión
04/02/2019
Lectores de este espacio trisemanal están extrañados porque Donald Trump no reaccionó con su acostumbrada beligerancia y verborrea primitivas contra México y su gobierno por la política de neutralidad activa, llamémosle así, hacia la República Bolivariana de Venezuela y la más que alebrestada oposición cuyo líder visible Juan Gerardo Guaidó Márquez preguntó el sábado a sus seguidores concentrados en Caracas: “En el mundo dicen que sí tenemos miedo de una guerra civil”, a lo que la multitud respondió con un “No”. Pero al español diario El País le dijo que “no hay riesgo de una guerra civil”. Publicación que reveló detalles sobre cómo el Departamento de Estado instruyó al gobierno de España para que reconociera al “presidente encargado”, desde antes de que Washington obligara a Guaidó a “destaparse”, sin consultar siquiera a sus pares de la Asamblea Nacional.
Por supuesta que el orangután –con todo respeto para los primates haplorrinos de la familia Hominidae y nativos de Malasia e Indonesia, conocido como “hombre de la selva”–, amaneció muy agresivo y antimexicano el jueves 31 y con una cascada de tuits sentencio como emperador del traspatio allende el Bravo y hasta la Patagonia:
“La situación de violencia en México es más grave que en Afganistán. Muy tristemente, los casos de asesinato en México en 2018 se elevaron 33% en relación con 2017, al llegar a 33 mil 341. Esto contribuye en gran medida a la crisis humanitaria que ocurre en nuestra frontera sur, y que se extiende por nuestro país. Peor incluso que Afganistán. Mucho de esto causado por drogas. ¡El muro se está construyendo!” Omite que el invadido país en 2001 es obra de George W. Bush.
Donaldo Juan lo dijo un día después de que los demócratas en la Cámara de Representantes ofrecieron un vago plan de seguridad fronteriza que no da un centavo al muro que exige. También anunció que no esperará a que el Congreso avance en el tema, y aseguró que ya hay trabajos en marcha en la frontera sur con financiamiento aprobado previamente. Y sugirió que podría usar sus facultades ejecutivas para declarar una emergencia nacional, aunque una acción así enfrentará obstáculos legales. No voy a esperar a este comité, afirmó, en referencia a los legisladores que están negociando para sacar un acuerdo antes del 15 de febrero.
Es decir, el muy prometido muro a su base electoral supremacista ya se le fue de las manos al magnate inmobiliario y con ello, todo indica, un segundo periodo en la Oficina Oval, tras de que fue obligado a recular en el cierre parcial del gobierno durante 35 días. Y como engañabobos anunció: “El muro ya se está construyendo”.
El Senado dio otro revés a Trump, al votar por gran mayoría (68 a 23) sobre una enmienda que critica su decisión de retirar a las tropas de Siria, lo que evidencia el fuerte malestar que hay en las filas republicanas con el presidente. Pero también pone en relieve el realismo presidencial al asumir la derrota militar que sufrió EU y sus beligerantes aliados locales a manos del gobierno de Bashar al-Ásad y Rusia, su aliado desde 1970 con la Unión Soviética, cuando gobernaba Damasco Hafez al-Ásad. Alianza que seguí desde Moscú en 1977-79.
Y, finalmente, la cancelación “por motivos de agenda” de la visita a México del insolente Mike Pompeo. Por fortuna 76.2% de los mexicanos apoyan la conducta del gobierno de Andrés López Obrador ante Venezuela, a pesar de la verdad única que divulga el oligopolio mediático y sus estrellas de la conducción y el comentario, lo que evidencia una crisis de credibilidad.
Comentarios
Publicar un comentario